Durante una cacería, el Príncipe Sigfrido se encuentra con una bandada de cisnes. Uno de ellos se transforma en una hermosa mujer, Odette, de la que el príncipe se enamora. Pero Odette, víctima de un conjuro que la mantiene cautiva en forma de cisne durante el día, solo puede recobrar su forma humana por la noche. Rothbart, el artífice del conjuro de Odette, engaña al príncipe para que este declare su amor Odile, idéntica a Odette, e incumpla así la promesa que le ha hecho a su amada. Condenada a ser un cisne para siempre, Odette solo tiene una manera de romper el conjuro del brujo.